5 Razones por las cuales no debes aceptar ser la amante

A veces creéis que tener un amante es lo mejor que os puede pasar en la vida, es tener una vida sexual activa sin tener ningún tipo de compromisos y siempre experimentar algo nuevo. Sin embargo, con el paso del tiempo este estilo de vida no siempre es el ideal. ¿Sois amantes de alguien? ¿Estáis planearlo serlo en un futuro? Mejor os dejamos las razones por las cuales no debéis aceptar ser la amante.

Razones para no aceptar ser la amante

Así como hay razones para aceptar ser la amante y no pensar en tener un compromiso con todo el mundo, debéis tener en cuenta que también se deben tener razones para no ser la amante. No os quedéis esperando que la vida os dé las respuestas, aprovechad, tomad estos consejos porque ser la amante no siempre es bueno:

No te permite progresar

Tener una pareja va mucho más allá de solo amarse o tener intimidad, se trata de construir un camino profesional y personal. Los amantes no son eso, solo se basa en tener intimidad y siempre encontrarse con la finalidad de satisfacer el deseo sexual. Si sois mujeres mayores de 30 años debéis tener muy presente vuestras prioridades que os permitan construir un camino hacia el éxito.

Un amante puede que provoque el efecto contrario, que solo os haga sentir estancadas y no podéis florecer a una vida llena de oportunidades. No os da estabilidad económica, personal ni mucho menos profesional. Necesitáis a alguien que esté para vosotras en los tiempos de trabajo estresante y el domingo por la tarde cuando estéis libres. No sois merecedoras solo de encuentros nocturnos o una vez cada que la otra persona pueda. Es mucho mejor buscar estabilidad con quien también podéis satisfacer vuestro deseo sexual, que buscar a una persona que no os aporta nada.

Ser la amante

No podéis hablar con él en cualquier momento

No es la primera persona a la que podéis llamar cuando sucede alguna buena noticia o cuando tengáis algún bajón emocional. Vuestro amante no es vuestra pareja, además es probable que la otra persona sí tenga algún compromiso con otra persona y vosotras solo seáis su segunda opción. Debéis planificar con antelación los encuentros, las llamadas o los momentos en que sí podéis conversar.

No hay libertad como en una relación promedio, hay reglas que seguir para que nada pueda salir mal. Es muy probable que ante estas circunstancias os sintáis solas o que estáis gastando vuestro tiempo en alguien que no vale la pena. Llega un punto en vuestras vidas en que el sexo pasa estar en un segundo plano y solo queréis acostaros junto a alguien y conversar sobre cómo ha estado vuestro día y adoptar alguna mascota. Sin embargo, el amante no cumple nunca el rol de alguien con quien pasar el tiempo, aunque no haya sexo de por medio.

Mujeres poderosas

No creáis en “me voy a divorciar”

Hay mayor probabilidad en las mujeres en creer que vuestro amante está enamorado de vosotras y pedirá el divorcio a su actual pareja, pero no es más que una mentira. La mayoría de los casos solo es una mentira para poder mantener su capricho de tenerlas a su lado. No creáis que podéis conseguir un futuro comprometedor junto a alguien que conocieron siéndole infiel a otra persona. ¿No creéis que tiene lógica? Si no le fue fiel a su actual pareja, ¿por qué seria fiel a vosotras?

No caigáis en falsas ilusiones ni creáis todo aquello que os pintan de brillos y colores. Vosotras merecéis a un hombre que os respete, que quiera estar con vosotras los domingos por la tarde y almorzar con vuestra familia en fechas importantes. Sois tan valiosas como para comer en el restaurante más caro de la ciudad con vuestra pareja sin tener que esconderse por si os descubrirán. Que se divorciará es una mentira nada más para no acabar con lo vuestro. ¡Ponedlo en su lugar y no aceptéis ser la amante jamás!

Amantes

No hacerle daño a otra mujer

No hagáis a otra lo que no quisieras que os hicieran a vosotras. Aunque el verdadero infiel es el hombre, vosotras estáis permitiendo en cierta medida que le sea infiel a su actual pareja. Si queréis romper con el ciclo de infidelidades no permitáis que suceda, los hombres deberían tener las pelotas necesarias para dejar a sus parejas si no logran satisfacer su deseo sexual o comunicar aquello que os incomoda o no los hace sentir completos.

Si vosotras estuvieseis en una relación no os gustaría que vuestra pareja os fuese infiel ni mucho menos perdonaríais a la mujer que se acostó con él. El daño a la pareja de vuestro amante lo estáis causando los dos. Aunque su pareja no sea más que una loca, alguna arpía o una pareja insoportable, ¡no permitáis que el hombre sea infiel! ¡Decidle que primero vaya a terminar con su pareja porque vosotras no permitiréis ser la amante! En los tiempos actuales es mejor apoyarse entre mujeres y mostrar que en la unión entre género, está la verdadera fuerza.

Ser la amante

Serás la segunda opción

Conocida mundialmente como “la otra”. Todas odiáis ser la segunda opción, es solo ser el reemplazo de algo que no salió como el otro esperaba. Ser la segunda significa que no sois prioridad, que no sois la primera en la que piensa ni en la que tienen de primera para planificar un futuro. Ser la amante significa que solo os tienen en cuenta cuando de sexo se trata y nada más. Vosotras no sois unos objetos para ser tratadas de estas formas.

Sois merecedoras de recibir cariño, amor y comprensión, merecéis alguien que esté con vosotras en las buenas y en las malas, que os tenga como una prioridad a la cual cuidar y darle su lugar. No debéis conformaros con menos, debéis primero entender vuestro valor para luego exigirlo. Ser la amante no os traerá felicidad, solo placer de unos minutos que no perdurará toda una vida. Vosotras sois vuestra propia prioridad, así que buscad a un hombre que también os tenga como primera opción.

Ser la amante

Consejo extra: Amor propio, ante todo

 No esperéis conseguir el amor en otra persona si vosotras aún no tenéis la plenitud del amor propio en vuestros corazones. No aceptéis menos de lo mucho que brilla una joya como vosotras, comprended vuestro propósito, hay que primero amar vuestra vida para luego estar preparadas para amar a otra persona.

No se trata de escoger al mejor postor, sino alguien que brille en vuestra misma sintonía. No permitáis ser la amante de un don cualquiera, encontrad una persona con quien quieras ser la amante, la esposa y también amiga. Hay hombres que os podrán ofrecer todo lo que pedís, así que tranquilas, siempre conseguiréis al amor de vuestras vidas.

Ser la amante

Conclusiones

La mayoría de las mujeres sueña con construir una familia, ser mujeres exitosas y estar en la cima del mundo antes de cumplir los 40. Os dejamos en claro, que ser la amante no os ayudará a cumplir algunos sueños y solo os hará cumplir caprichos pasajeros. Existen mucho más que 5 razones para no aceptar ser la amante.

Es más lo que juega en contra, que a favor. Analizad bien vuestro entorno, vuestra vida, vuestro día a día. ¿De verdad creéis que ser la segunda es lo que hubiese deseado vuestra niña interna? No os conforméis y buscad lo mejor para vosotras.

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