Las uñas arregladas son indispensables para la vida diaria de muchas mujeres, sin embargo, existen muchos inconvenientes cuando no son completamente fuertes. No hay nada peor que una uña rota, que ocasione un desequilibrio en la estética de las manos. No siempre es una buena opción colocar gel o uñas postizas, a veces la mejor opción son las uñas naturales, por eso mantenerlas fuertes y saludables es de las mejores decisiones que pueden tomarse. ¿Quieres conocer algunos tips y recomendaciones? Aquí te los dejamos.
¿Cómo puedo hacer para que mis uñas luzcan increíbles?
No hay satisfacción más grande en una mujer que tener uñas naturales fuertes y saludables. Sin embargo, es un resultado que requiere de un buen trabajo previo, que permita lograr los objetivos deseados. Es cuestión de adquirir buenos hábitos y un estilo de vida que permita crear un balance. Aun así, estas recomendaciones que les compartiremos son generales, pues en caso de tener alguna condición pre establecida, es necesario asistir a un dermatólogo o especialista.
También, destacamos que serán recomendaciones para uñas de las manos y los pies por igual, pues la idea es mantener un estilo de vida que abarque la mayor cantidad de beneficios posibles. Ahora sí, a continuación les presentamos nuestros mejores tips, recomendaciones y consejos que alguien que desea lucir con mucho estilo sus uñas, no puede perderse:
No te las comas ni las llenes de saliva
A veces, por nervios u otro tipo de inquietudes o hábitos personales, muchos suelen comerse las uñas. ¡Este es el primer error! Llevarse las uñas a la boca, comerse los cueros o las propias uñas es todo un acto de asesinato hacia ellas. Quizás sea una de las acciones que más cueste desaprender, pero hay quienes incluso suelen echarse un poco de ajo con los brillos de uña. Existen muchos trucos para no seguir haciéndolo, pero sin duda, aquí entra en juego la fuerza de voluntad.
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Hay que tener la capacidad para resistir y no hacerlo. Además, comerse las uñas puede traer graves consecuencias como infecciones e incluso hongos. Por otra parte, es malo para la salud de cualquier persona porque las manos están en contacto con todo, es decir que acumulan muchos gérmenes y bacterias. Llevar las manos a la boca también se considera un daño para la salud bucal y estomacal. Todo es una cadena.
Si estás en proceso de cura, no tengas mucho contacto con el agua
Claro está, para actividades diarias como bañarse, lavarse las manos o hacer algunos quehaceres, el contacto con el agua es inevitable. Pero en estos casos se trata del contacto con el agua en áreas como piscinas o cualquier otro lugar donde se tengan sumergidas durante un tiempo prolongado. Esto ocasiona una acción similar a un cartón, a medida que tiene más contacto con el agua, va perdiendo su fuerza y ocasiona que sea más frágil.
Si aún no son fuertes, mantenlas cortas
Es muy lindo tener las uñas largas, pero mientras están en su proceso de crecimiento y fortalecimiento, es recomendable mantenerlas cortas. Esto evita que se rompan y luego tengan formas diferentes, así como también permite que la uña mantenga una firmeza en sí misma, debido a que no se estará usando para no hacer ningún esfuerzo. Así también, mantenerlas cortas va ligado a la anterior recomendación de no comerlas, pues si están cortas, irá disminuyendo la ansiedad o necesidad de llevarlas hacia la boca.
Por otra parte, no es solo mantenerlas cortas, sino el cómo. Algunos aconsejan que se usen corta uñas, pero también es una buena opción usar limas de grano fino. Esto ayuda a que no sea un efecto abrasivo para las puntas y permite mantener una forma pareja. Así se mantendrá una integridad y pulcritud en las manos. No hace falta tener uñas largas para lucir elegante.
Hidrata superficie y cutículas
Aunque parezca algo que solo sucede cuando se hace manicura, hacerlo a diario o varias veces a la semana es muy recomendado. Para ello, existen diferentes tipos de aceites, llenos de nutrientes y que ayudan a las cutículas a regenerarse y a las uñas adquirir las vitaminas suficientes para ir creciendo sanas y fuertes. Así también, está hidratación puede ir derivada de las mismas cremas de manos, solo se trata de hacer masajes en cada uña, de forma suave y delicada, para evitar maltratos.
De esta manera, las uñas irán teniendo mayor flexibilidad pero también resistencia, en caso de doblarse será menos probable que se rompan, caso contrario a cuando están resecas. Una última recomendación de este consejo, es que se evite tener contacto con el agua al menos por una hora, cuando se apliquen las cremas o aceites, para asegurar que se absorban los nutrientes y hagan su efecto.
Toma agua, aliméntate bien y toma suplementos
Todo es interdependiente y la alimentación y los estilos de vida se reflejan mucho en las uñas. Una persona saludable usualmente tiene uñas fuertes, así como también tiene buenos hábitos de cuidado. Si comer bien o tomar mucha agua no es suficiente, también los dermatólogos suelen recomendar ciertos suplementos dedicados única y exclusivamente al fortalecimiento de las uñas. Puede que tengan un efecto retardado, de más de uno o dos meses, pero poco a poco vale la pena los resultados. Hay que tener disciplina.
Conclusiones
Cuidarse las uñas no es un tema de ser más femenina o no, sino de salud. Las uñas como las manos son las que están en contacto con todo, cuidarlas y mantenerlas limpias refleja nuestra higiene y los buenos hábitos de vida. Así también, mantenerlas cuidadas y fuertes ayuda a que las mujeres se vean más arregladas, bonitas y seguras de sí mismas. ¿Qué otros consejos te gustaría compartir para las mujeres que desean tener las uñas grandes y saludables? Deja tu respuesta en los comentarios.